¡Al fresco!
!Yaha! ¡Fuera con los pájaros, hombre! ¡Las ratas del aire! ¡Aha!
Válgame Dios y válgame Dios, cómo vengo de verdad, cómo vengo que... Vengo morado ¿eh?, ¡Vengo morao! Pfff...
Madre mía, es que este fin de semana ha venido mi cuñado, el hermano de mi mujer, y ha estado tocando los cojones desde que vino, hasta ayer que se fué. Mi cuñado es de esta raza de personas que no hacen más que joder. Mi cuñado es de... "los listos".
¿Os gustaría saber cómo son, cuál es la idiosincrasia de los listos? Y lo más importante: ¿Cómo deshaceros de ellos? Todo esto, dicho con palabras llanas, os lo va a explicar vuestro amigo Marcial Ruíz Escribano, para serviros.
Como os decía con anterioridad, los listos son la gente que les gusta dar por culo, vamos, disfrutan con eso. Por ejemplo: estás -yo que sé- arreglando alguna cosa, y ellos van y se ponen detrás y empiezan a decirte cómo lo tienes que hacer. Pero vamos, mirad, mirad lo que me pasó a mí el otro día.
-¿Qué haces cuñado, que tú eres muy manazas?
-Y encima te gasta bromicas, no te lo pierdas. Ahora empiezan las apreciaciones.
-Lo estás haciendo mal, que mi mujer tiene una igual.
-¿No os lo había dicho? Ahora me dirá cómo lo tengo que hacer.
-Deja, hombre, deja, si lo que tienes que hacer es juntar esos dos cables. Júntalos. Júntalos, cuñado.
Y ya como colofón, dicen una de sus frases favoritas.
-Meh, te lo dije, ¡que eras muy manazas! Ay... Lo ha roto.
Claro, como son tan licenciados, ¡que saben de todo!, y pueden opinar de lo que quieran. Vamos, si lo sabré yo.
-¡Venga! ¡Ah!
-¿Qué pasa, es que te dan de comer estos, eh? ¿Es que te dan de comer? Ha, Dios mío...
-¿Cuánto dices que te ha costado, el coche?
-12000 Euros.
-Hombre, te han engañado. Yo te lo consigo, kilómetro cero, por 4000 Euros.
-Tu hermana le echa leche, entonces salen como más melosas. Estas están como apelmazadas, ¿no ves? mira, está apelmazada.
-Esa uva la tienes que vendimiar ya, cuñado, que se te va a echar a perder.
-Uyy uyuy... ¡esas vigas tienen termitas!
-¡Te has puesto gordo, Marcialete!
-Un pico y una pala les daba yo a esos.
-Yo te lo dije.
-Que eres muy blando, Marcial.
-Te lo dije.
-Hazme caso.
-Te lo dije.
-Te lo dije.
-Si es que te lo dije.
-Te lo dije.
-Ay, si es que te lo dije.
Es para matarlos, pero atentos, que os voy a decir cómo deshaceros de ellos.
-Marcial, ¿te he contado que me he comprado una tele de plasma de 42 pulgadas por... bueno, no ha llegado a 300 Euros. Claro, que tú... si tú no sabrás ni lo que es el plasma.
-¡VESTE A LA MIERDA! Joder, que ha gusto me he quedado.
-Nena, recoge que nos vamos.
He intentado pasar por alto el marcado acento de los personajes y transcribir no fonéticamente sino de forma que se pueda buscar en un diccionario ("cuñado" cuando dicen "cuñao", "apelmazadas" cuando dicen "apelmazás"), excepto en el grito final: "¡Vete a la mierda!".