A la administración de la universidad le gusta de esta forma, porque les paga menos que a los profesores que trabajan a tiempo completo.
El libro de texto obligatorio principal de lectura realmente es un asco.
No está bien escrito.
Hasta la organización del libro es mala.
No trata la materia de forma lógica, equitativa ni completa.
Lo que es peor, algunos temas secundarios faltan por completo.
No están incluídos en absoluto.