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EL TÚNEL SECRETO
Vamos, te invito a mi refugio –me dijo el soldado-.
Está en un viejo edificio en el extremo de la ciudad.
Tiene un gran sótano donde podemos escondernos y hay otros edificios que podemos visitar.
Ocultándonos bajo los árboles, caminamos de regreso a Londres.
Era la primera vez que regresaba desde la invasión.
Por suerte nadie nos vio.
Cuando finalmente llegamos al refugio del soldado y vi el edificio, comprendí que el hombre exageraba.
El famoso “sótano” sólo era un túnel de diez metros de largo.
¡Había tardado toda una semana en cavarlo! -Ayúdame a seguir cavando este túnel –me dijo.
-¿Por qué? -Porque es nuestro camino al éxito.
Pienso que desde aquí podremos llegar hasta la cloaca principal sin ser vistos por los extraterrestres.
En ese momento comprendí que aquel túnel era parte de su plan.
Trabajamos en el túnel durante varias horas y al final comencé a sospechar que tal vez no estábamos excavando en la dirección correcta.
-Tomemos un descanso –dijo el soldado al escucharme-.
Subamos al techo.
Quiero ver cómo andan las cosas y si hay marcianos cerca… Subimos al techo y miré la ciudad.
Había muchos edificios destruidos.
Muy lejos, hacia el norte, una gran columna de humo oscurecía el horizonte.
Caminamos un rato por los techos de los edificios sin ver a ningún marciano.
Después de conseguir comida y algunas provisiones, regresamos al refugio del soldado.
Durante el resto de la tarde, hablamos sobre los planes futuros.
Cuando se hizo de noche, subí otra vez al techo y observé la ciudad.
Había unas extrañas luces en el mismo lugar donde antes estaba la columna de humo.
REGRESO A CASA Esa noche pensé en todo lo sucedido.
Entonces comprendí que era muy poco lo que realmente sabía sobre la invasión.
¡Ni siquiera sabía si mi esposa y mi familia habían sobrevivido! ¿Sería posible que estuvieran vivos? Sólo había un modo de averiguarlo.
Tenía que regresar a casa, buscarlos y traerlos aquí.
¡Si no lo hacía jamás me lo perdonaría! La mañana siguiente me despedí del soldado y caminé hacia mi antiguo hogar.
Caminé durante varios días entre las ruinas de la ciudad.
Tenía que encontrar a mis familiares y llevarlos al refugio.
Y luego seguiríamos el plan del soldado: Formaríamos un nuevo ejército y aprenderíamos todo lo necesario para destruir a los invasores.
Sólo así lograríamos ganar nuestra lucha contra los extraterrestres… una lucha a muerte entre dos especies de diferentes planetas, que todos conocimos como LA GUERRA DE LOS MUNDOS…