Para hacer nuestros donuts caseros vamos a necesitar:
- 500 gramos de harina de fuerza (la harina de fuerza es la que se utiliza para hacer masas y pan, en concreto la de la marca "Día" ya es una harina de media-fuerza, que nos puede valer.)
- 80 gramos de azúcar.
- 2 sobres de levadura seca para pan (esta levadura no es la que se utiliza en los bizcochos, es una levadura como la levadura fresca, pero que viene liofilizada.)
- 5 gramos de sal.
- 250 gramos de leche.
- 1 huevo.
- 40 gramos de mantequilla.
- Aceite de girasol para freírlos y para darles aroma ralladura de naranja y cardamomo (el cardamomo es una especia que podéis encontrar en la sección del Club del Groumet del Corte Inglés. Si no queréis usarla, podéis prescindir de ella, pero da un aroma muy característico a los donuts.)
Y después para la glasa vamos a necesitar: Azúcar glass, agua y mantequilla, porque voy a hacer la glasa característica de los donuts, pero si queréis también podéis bañarlos en una mezcla de chocolate derretido con un poco de nata.
Bueno, pues vamos a comenzar echando en un bol grande la harina. A continuación echaremos el azúcar y los dos sobres de levadura.
Vamos a incorporar también la sal, que lo haremos en una esquina que no toque con la levadura. Y después vamos a echar el cardamomo. El cardamomo son estas vainas verdes que como veis tienen unas semillitas negras en el interior, las vamos a echar en un mortero y las vamos a machacar bien.
Vamos a añadir también la ralladura de naranja, que la vamos a sacar con un rallador fino, procurando no llegar nunca a la parte blanca porque esta parte nos amargaría los donuts, tenemos que conseguir rallar solamente la parte naranjita de la piel.
Lo machacamos bien con el mortero y lo agregamos al bol con el resto de ingredientes.
Mezclamos todo con ayuda de una cuchara y vamos a incorporar la leche y el huevo, y vamos a continuar mezclando hasta conseguir una masa que empiece ya a despegarse de las paredes y ya nos vaya a resultar manejable con las manos.
La vamos a volcar en la mesa de trabajo que habremos limpiado bien y vamos a trabajarla con las manos, agregando un poquitín de harina a medida que veamos que la va necesitando, si vemos que se nos pega a la mesa o a las manos vamos incorporando un poquitín más de harina y seguimos trabajando, hasta conseguir una bola de masa que tenga este aspecto.
La aplanamos ligeramente con las manos y vamos a agregar en el centro la mantequilla, que tendremos derretida o blandita.
Vamos a cerrarla dentro de la masa y vamos otra vez a trabajar hasta que la mantequilla quede bien incorporada.
Este momento es un poco desesperante, porque una masa que ya se trabajaba bien, de repente se vuelve otra vez pegajosa y muy difícil de trabajar, pero no os preocupéis que vamos agregando un poquitín más de harina y vamos a volver a conseguir que la masa esté perfecta.
Cuando ya no se nos pegue a las manos ni a la mesa vamos a formar una bolita y la vamos a tapar con un año limpio, y la vamos a dejar reposar durante una hora.
Este tiempo es aproximado, porque lo que realmente tenemos que ver es que la masa haya doblado su volumen. Cuando la masa haya crecido la vamos a estirar con ayuda de un rodillo, dejándola de un centímetro de grosor, si no tenemos rodillo podemos utilizar una botella limpia. Y vamos a comenzar a recortar los donuts, ayudándonos de dos aros de distinto diámetro, yo voy a utilizar un aro de emplatar y el tapón de una botella de refresco, pero si no tenéis aro, podéis utilizar un vaso o lo que se os ocurra.
Vamos apartando los donuts y dejándolos sobre una hoja de papel vegetal y continuamos el proceso hasta terminar con toda la masa.
Y vamos a dejarlos reposar durante una hora.
Y por último vamos a pasar a freírlos. Pondremos una sartén profunda con abundante aceite de girasol al fuego, y cuando esté caliente iremos echando los donuts. El aceite no puede estar demasiado frío porque los donuts se irían reventando ni demasiado caliente porque se dorarían demasiado rápido y quedarían crujientes.
Así que lo mantendremos a temperatura media y les iremos dando la vuelta a medida que se vayan dorando por un lado. Cuando ya estén dorados por los dos lados los vamos sacando sobre el papel absorbente y continuamos friendo el resto de donuts.
Y para terminar vamos a realizar la glasa. Voy a echar en un cuenco pequeño dos cucharadas de mantequilla y lo voy a meter al microodas en la temperatura de descongelar durante dos minutos para que se derrita. Después voy a agregar dos cucharadas de azúcar glass y tres cucharadas de agua, y voy a comenzar a remover.
A medida que veamos que el azúcar glass está integrado, iremos agregando un poquitín más y seguiremos removiendo. Así le vamos añadiendo más azúcar hasta que veamos que la glasa tiene esta consistencia.
Y ya sólo nos queda bañar los donuts de manera generosa con la glasa. Yo lo estoy haciendo ayudándome de una brocha de silicona, pero si no la tenéis podéis hacerlo con una cuchara.
Los dejaremos secar y ya podemos disfrutar de nuestros donuts. Recordad que si no queréis hacer esta glasa, podéis derretir en un cazo al fuego o en el microondas un poco de chocolate con un chorro de nata líquida. Una vez que esté bien deshecho bañamos los donuts en esta mezcla y ya tenemos donuts de chocolate.
Espero que os haya gustado y nos vemos en el siguiente vídeo. Chao!
